Hoy quiero hablar de ese momento en que sientes que deberías lanzarte a por tu sueño pero tu mente saboteadora empieza a lanzarte mensajes del tipo: «lograrlo será imposible», «es demasiado para ti», «te faltan conocimientos, habilidades, talento…», «otras personas lo han conseguido pero no significa que tú puedas hacerlo», «es demasiado bonito para ser real»…
Lo que habitualmente sucede cuando nos abordan estos pensamientos, es que nos quedamos en el mismo sitio en el que estamos, paralizadas. Lo peor de todo es que podemos quedarnos ahí por años, o incluso no llegar ni siquiera a intentar aquello que intuimos que nos traería la felicidad.
Últimamente no dejo de observar aquello que se me pasa por la cabeza. Analizo cada pensamiento para así intentar desmontar aquellos que no se ciñen a la realidad. Eckhart Tolle dice que «no somos lo que pensamos» y menos mal.
Los miedos aparecen siempre que de verdad deseas algo. Son una especie de termómetro de lo que de verdad te gustaría hacer. La clave está en ser capaz de transformar el miedo en acción y no dejar que te paralice.
Otro paso muy importante para mi está siendo aprender a detectar el miedo cuando lo siento. Me cuesta mucho reconocerlo, ya sea consciente o inconscientemente, y prefiero disfrazarlo de otras mil maneras.
En mi opinión, cuando somos capaces de detectar aquello que nos paraliza hemos hecho un gran avance. Podemos ser conscientes de que muchos de los argumentos de la mente no sirven para nada y hacer que se marchen por donde han venido. Éstos no dejan de aparecer, pero se trata de intentar que consuman el mínimo espacio posible en tu cabeza. Al final es algo así como un pulso en el que tomar acción es lo que derrotará a la mente.
La acción es lo que definitivamente acaba con ese miedo y te hace más fuerte. Ser consciente de ellos, analizar de dónde vienen, aceptarlos, reconocerlos y tomar acción, son los factores que te permitirán avanzar.
Un abrazo,
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Hola. Tienes razón los miedos nos paralizan y esos temores muchas veces no tienen fundamento porque es poco probable que ocurran. Claro esta siempre van existir. Me gusta eso de detectarlos. Si somos razonables y aprendemos a percibirlos de seguro estamos dando el primer paso para superarlos. Creo que uno debe arriesgarse porque sino le queda la sensación de frustración o vacío y eso es peor.
Gracias Sisi por tu comentario. Estoy de acuerdo en lo que dices, muchas veces hacer las cosas con miedo es la única forma de pasar a la acción. Un abrazo.
Estupendo.
Aplica el comentario «menos es más»
Me explico:
En esta sencillez está la verdad de la vida. No en cosas rimbombantes o exóticas. Pareciera «simple» y no! Es justamente eso: la VIDA!
Eso es, implementar en la vida la sencillez, algo que se nos ha olvidado al cargar la vida de cosas y pensamientos superfluos que muchas veces solo restan. ¡Gracias!